domingo, 22 de agosto de 2010

El huevo de goma




¿Qué vamos a hacer?
Obtener un huevo que es capaz de botar
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Material.
o       - Huevo,
o      - Vinagre (disolución de ácido acético o etanoico).
o      - Un frasco o vaso de precipitados.

Procedimiento.
Llenamos un vaso de precipitados con 100 ml. de vinagre e introducimos un huevo entero y crudo y lo tapamos o ponemos un vaso de precipitados mayor sobre éste, para evitar que se escape el mal olor, pues tanto el acido acético que contiene el vinagre y el carbonato de calcio que obtendremos huelen mal.

Se observan unas burbujitas
Al día siguiente vaciamos el contenido del vaso y volvemos a verter vinagre.
Al segundo o tercer día sacamos el huevo.


¿Qué sucede?
El tamaño del huevo ha aumentado y además si lo dejamos caer no se rompe e incluso puede efectuar pequeños botes, parece de goma.

Lo introducimos en miel y el huevo disminuye su tamaño.

  
Explicación.
La cáscara del huevo es un 94% carbonato cálcico.
El vinagre contiene ácido acético que reacciona con el carbonato de calcio de la cáscara haciéndola desaparecer poco a poco, desprendiéndose un gas el dióxido de carbono (las burbujitas que observábamos).

Al cabo de 2 ó 3 días la cáscara del huevo ha desaparecido y la membrana que hay debajo de la cáscara adquiere una consistencia gomosa, que le permite botar.
Su tamaño ha aumentado debido a que parte del líquido atraviesa la membrana que es semipermeable.

Al introducirlo en miel, el líquido atraviesa la membrana semipermeable y sale al exterior por lo que el huevo disminuye de tamaño. 

Carbonato de calcio y-disolución de acido acético= agua + acetato de calcio ´+ CO2(gas)


DSCN24842.jpg


Medio hipertónico e hipotónico
2ª Experiencia: El huevo transparente
¿Qué vamos a hacer?
Ver el interior de un huevo sin necesidad de romper la cáscara.
Material: 
huevo, vinagre blanco
recipiente (vaso de precipitados)
Linterna
Procedimiento
Cogemos el huevo del experimento anterior, lo iluminamos, ahora lo podemos ver su interior.
Explicación
Llama la atención que la frágil membrana que protege al huevo sea más resistente al ácido que la dura cáscara. Es aconsejable, aunque no imprescindible, que el vinagre sea de vino blanco lo cual nos facilitará ver mucho mejor la estructura interna del huevo. También es aconsejable cambiar varias veces el vinagre conforme se vaya enturbiando el líquido o depositando el calcio en el vaso.
Una experiencia similar puede hacerse con vinagre y con huesos de pollo: al cabo de unos días aparecerán flexibles al haber perdido el calcio que les daba la rigidez característica